Reseña histórica

Reseña Histórica

El célibe demográfico y económico de las últimas décadas en el medio rural tiene en este pueblo uno de los más claros ejemplos. Con una vasta historia, cabecera de una amplia comarca y con recientes recuerdos de la alfarería del pueblo, Fresno es hoy una localidad que dista mucho del esplendor que gozó en otros tiempos.
Situado en una ladera del cerro del Castillo, donde existió una pequeña fortaleza que controlaba este valle, atravesado por uno de los numerosos arroyos que vierten al río Riaza, el pueblo tiene como principal episodio de la historia de España que en su término se enfrentaron en el año 1111 las huestes de doña Urraca contra las de su esposo Alfonso I el Batallador en la cocina batalla de Candespina tras la que este último se haría con el control del territorio.
Como testimonios de lo acontecido en el ayuntamiento y en la casa de la Comunidad de Villa y Tierra se conservan los documentos históricos y pergaminos de la época de los reinados de Alfonso VIII, Sancho IV y Reyes Católicos. La plaza del pueblo se denomina "la picota", pues seguramente en ella estuvo instalado el rollo jurisdiccional de villa y donde se juzgaba a los acusados.
Al término municipal de Fresno de Cantespino pertenecen los lugares de Cascajares, Castiltierra, Cincovillas, Pajares de Fresno, Riahuelas y Gomeznarro.
De la vieja fábrica de cerámica que llegó a tener numerosos trabajadores, queda como recuerdo el oficio de algunos artesanos que siguen realizando objetos de alfarería. Y dentro de la gastronomía típica, pueden degustarse las codornices, famosas en toda la provincia.
En cuanto al rico patrimonio artístico, al visitante le da la bienvenida un crucero situado en la entrada del pueblo. Y dentro del casco urbano, la Iglesia parroquial de San Nicolás de Bari, que reemplazó a otra más antigua que allí existía y que seguramente era románica, de la cual dentro del templo queda una vieja pila bautismal, a la que se suman las de Castiltierra, Cincovillas y Aldeanueva. La planta del templo se distribuye en forma de cruz latina y se comenzó a edificar a mediados del siglo XVI, aunque sus obras y reformas no se terminarían hasta finales del siglo XVII. El retablo mayor es obra de mediados del siglo XVIII y en él destacan la imagen del santo titular y la de la Asunción de la Virgen , así como una pintura sobre tabla del siglo XVI que representa a la Virgen con el Niño. Varios retablos barrocos enriquecen su patrimonio artístico, junto con una buena cruz parroquial del siglo XV, una mejor custodia del siglo XVIII y un buen órgano de esa mismo época.
Los vecinos celebran las fiestas del Santo Cristo de la Cerca, el segundo fin de semana de septiembre, con multitud de actividades, sobre todo infantiles. y también acuden a la romería que se celebra en la ermita del Santo Cristo del Corporario en el anejo de Castiltierra, el segundo domingo de mayo.